Fecha/Hora
08 Jul
Todo el día
Categorías
Primera lectura: Oseas 2,16.17b-18.21-22
Salmo 144
Evangelio: Mateo 9,18-26
Mientras Jesús les estaba hablando, llegó un jefe de los judíos, se arrodilló ante él y le dijo:
— Mi hija acaba de morir, pero si tú vienes y pones tu mano sobre ella, volverá a la vida.
Jesús se levantó, y acompañado de sus discípulos se fue con él. Entonces una mujer que desde hacía doce años estaba enferma, con hemorragias, se acercó a Jesús por detrás y tocó el borde de su capa. Porque pensaba: «Con solo tocar su capa quedaré sana». Pero Jesús, volviéndose, vio a la mujer y le dijo:
— Ánimo, hija, por tu fe has quedado sanada.
Y desde aquel momento quedó sana.
Cuando Jesús llegó a casa del jefe de los judíos, y vio a los músicos que estaban preparados para el entierro y a la gente que lloraba a gritos, les dijo:
— Salid de aquí. La muchacha no está muerta, sino dormida.
La gente se burlaba de Jesús, pero él los hizo salir; luego entró, tomó de la mano a la muchacha y ella se levantó. Y por toda aquella región corrió la noticia de lo sucedido.