LO SIGUIENTE AL SER HUMANO

Se llama Óptimus y es un humanoide que Elon Musk fabricará en masa. Aún está en una versión muy mejorable, pero Musk es positivo y cree que pronto lo mejorarán notablemente. Su intención es venderlo por menos de 20000 dólares, para que realice tareas sencillas, trabaje e incluso haga de divertido compañero o amigo. Madre mía, el futuro ya está aquí.

La verdad es que el tema de la robótica ha ido entrando poco a poco en nuestras vidas. Yo, desde que tengo un robot de cocina, como mejor de lo que nunca he comido desde que me emancipé. Hay robots que limpian, coches que aparcan solos y aparatos electrónicos con los que puedes hablar. En las escuelas se aprende robótica y se trabajan las materias con las nuevas tecnologías (TIC se llaman). ¡Y hasta existen robots-camareros (yo los he visto)! Es lógico que lo siguiente sea poner un humanoide en nuestras vidas.   

Parece ser que el próximo paso al humanismo en la escala evolutiva es el transhumanismo, que permitirá mejorar la condición humana mediante la tecnología. Frente a esto, y sin ánimo de ir contra el progreso (gracias a este hemos conseguido llegar hasta donde estamos), me surgen dos cuestiones.

La primera es: ¿somos capaces los humanos, limitados como somos, de «traer al mundo» criaturas y creaciones que nos superen, física y psíquicamente? ¿Es posible que, desde nuestras limitaciones, fabriquemos seres que no las tengan? Y si así ocurre, ¿cómo conseguiremos que humanoides mejores que nosotros respeten nuestra «inferioridad»?

La segunda es: ¿llegará el día en que el robot ya no solo nos facilite la vida sino que nos la complete? ¿Preferiremos tener como compañero a un robot que a una persona? ¿Cómo será nuestra relación con ellos? Parece que estamos dentro de un libro de Isaac Asimov.

Lo que más me llama la atención es que el acto de perfeccionar no pasa por nosotros. Jesús dijo: «Sed perfectos, como vuestro Padre es perfecto». Y nosotros lo que parece que hemos entendido es que nos demos por perdidos como especie y creemos otra que cumpla lo que nosotros no hemos logrado ni lograremos nunca: la perfección. No entendimos que la perfección de la que habla Jesús no está fuera de nosotros, sino que es la vocación a ser plenamente lo que hemos sido llamados a ser.

No sé, puede que esté exagerando…. o que me falte información acerca de todo esto de la robótica y los autómatas. Puede ser que nos adaptemos buen a todo esto que está por venir (porque vendrá, seguro) y consigamos no perder nuestra humanidad en un mundo cada vez más tecnológico. Habrá que esperar para verlo y habrá que prepararse también para que sea mejor que los tiempos pasados. Musk dice que tendrán cuidado en «no seguir el camino de Terminator». Pues menos mal, solo nos faltaba eso.