EN CUANTO AL “TEMPLO” Y LO QUE LE RODEA.
NO, NO ES LO MISMO
QUE ADORES A DIOS EN EL TEMPLO (QUE SE DESTRUYE)
A QUE
LE ADORES EN -CUALQUIER LUGAR- EN “ESPÍRITU Y VERDAD”.
NO, NO ES LO MISMO
QUE TE GUSTE LA BELLEZA DE SUS PIEDRAS DE CALIDAD Y EXVOTOS
A QUE
TE SIENTAS TEMPLO “BELLO Y AMADO”.
NO, NO ES LO MISMO
QUE VALORES LAS FORMAS DE UNA CELEBRACIÓN
A QUE
CELEBRES DE FORMA “HONESTA Y ABIERTA” A LA TRANSCENDENCIA.
NO, NO ES LO MISMO
QUE BUSQUES A DIOS EN LAS ALTURAS
A QUE
TE MUEVAS EN UNA -ALTITUD DE MIRAS-, “CONFIADA Y AMOROSA” EN ÉL.
NO, NO ES LO MISMO
QUE USES EL ESPACIO SAGRADO A TU ANTOJO
(INTERESES PROPIOS Y DE MERCADO)
A QUE
INTENTES CREAR AMBIENTE, PARA HACER Y HACERTE PREGUNTAS Y OFRECER EVANGELIO.
NO, NO ES LO MISMO
QUE ESPERES LA RESURRECCIÓN DE LOS MUERTOS
(PARA SABER A QUIEN PERTENECES)
A QUE RESUCITES CADA DÍA A LA VIDA QUE TE REGALA DIOS, SU DUEÑO.
NO, NO ES MISMO
QUE TE DIGAN LO QUE TIENES QUE REZAR -Y LA MANERA-
A QUE
PUEDAS TOMAR LA INICIATIVA Y ORAR LO QUE LLEVAS EN EL ALMA. ¿ES LO MISMO Y/O, DA LO MISMO?